El polémico caso del presunto homicidio de José Eduardo Ravelo Echeverría (a) “El Güero”, de 23 años de edad, empieza a llegar a su fin, pues la Fiscalía General de la República (FGR) afirmó que la causa de la muerte fue por neumonía, al mismo tiempo que descartó que víctima de violación y tortura en su contra.
Sin embargo, de acuerdo con los resultados obtenidos, hubo falsedad en los dictámenes ministeriales del caso del joven veracruzano, por lo que deslindará responsabilidades en contra de personal de la Fiscalía General del Estado (FGE) de Yucatán.
De acuerdo con la FGR, el 18 de agosto de 2021, la madre del joven José, fallecido en Yucatán, presentó denuncia ante la Fiscalía y se inició la carpeta de investigación por la probable comisión del delito de tortura.
A partir de ese momento, la Fiscalía recabó más de 50 testimoniales; también realizó 45 periciales de diversas materias (medicina forense, química, genética, mecánica de lesiones, criminalística, audio y video, e informática, entre otros); más 35 informes de Policía Federal Ministerial (PFM), y tres inspecciones ministeriales.
Se realizó, asimismo, la exhumación del cadáver y la necropsia, en la que se concluyó que José falleció por neumonía no relacionada con algún traumatismo recibido durante su detención.
Igualmente se analizaron las videograbaciones de la totalidad de los hechos, desde el momento de su detención, hasta su llegada a la cárcel (11 minutos). Igualmente, se analizaron los videos de su estancia en la cárcel (24 horas). Del análisis de todos los videos, NO se advierte violación a los derechos humanos o comisión de algún delito. Sólo se advierten maniobras de sujeción respecto de la persona que se resiste al arresto. (Todos los videos están a disposición de los ofendidos y lo estarán a disposición del Juez competente, en su caso).
A través de la mecánica de lesiones, se concluyó que las lesiones causadas a José fueron correspondientes con maniobras de sujeción de una persona que se resiste al arresto y que tardan en sanar menos de 15 días; no poniendo en peligro la vida.
Las declaraciones de los testigos son consistentes en señalar que el joven mencionado se resistió al arresto.
Los números y colores de la patrulla señalados por dicho joven en la declaración en la que describe las agresiones sufridas no corresponden a la evidencia, ya que no existen tales uniformes y características. En este caso, la búsqueda se amplió a todas las corporaciones que operan en la zona conurbada de Mérida, incluyendo policía estatal y municipales de Mérida y Kanasín.
Se determinó, a través de periciales en medicina, la situación de salud de la víctima, lo cual se omite por respeto. Se llevaron a cabo también testimoniales de personas que convivieron con él en los meses previos a su muerte.
En definitiva, la investigación de los hechos confirmó que NO existió tortura, ni violación sexual, por parte de los elementos aprehensores de la policía municipal.
Lo que SÍ existió fue la falsedad en dictámenes ministeriales; por ello, el 18 de octubre se ejercitó la facultad de atracción, sobre las conductas presuntamente responsables de personal de la FGE que falsearon dictámenes periciales y presionaron ilícitamente a testigos, con la finalidad de ejercitar acción penal en contra de policías municipales.
Actualmente, se está en proceso de judicialización, para ejercer acción penal en contra de tres servidores públicos de la FGE de Yucatán.
La FGR continúa con su investigación respecto de la posible negligencia médica, por parte de médicos responsables del Hospital General del Estado