Integrantes de la Comunidad Maya de Telchaquillo en Defensa de la zona arqueológica de Mayapán descartaron la venta de las ejidales sobre las que está el sitio, ya que “herencia de nuestros antepasados”.
“Aunque las noticias que han surgido en el pasado sobre este conflicto giran en torno al debate por el precio de la tierra, hoy queremos decir de manera clara que no es deseo ni de la mayoría del ejido ni de la comunidad vender las tierras de Mayapán y que no aceptamos que sean expropiadas de ninguna manera. Decimos claramente no a la expropiación convenida ni unilateral”, coincidieron.
De acuerdo con el comunicado, “Mayapán es parte fundamental de nuestra vida, de nuestra historia, de nuestra cultura y por lo tanto tiene que ser parte de nuestro futuro, del patrimonio que le dejaremos a nuestros hijos”.
Por eso queremos denunciar que estamos en contra de las intenciones de “Expropiación Convenida” que intentan hacer por un lado el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) y por el otro las autoridades ejidales que no quieren escuchar la voz de la máxima autoridad que es la asamblea”, subrayó.
Incluso, se mencionó que “ante el hecho de que ni la autoridad ejidal, ni el consejo de vigilancia, está actuando conforme lo dicta la asamblea, quien es la máxima autoridad, optamos por la conformación de este Comité que cuenta con el respaldo de la mayoría de ejidatarios y de la población”.
El Comité de Lucha Indígena de Telchaquillo es quien representa a la comunidad en lo relacionado a Mayapán, por lo que emitieron diversas demandas.
En primer lugar, tanto el núcleo agrario como la población de la localidad de Telchaquillo no aceptan la expropiación convenida ni unilateral de Mayapán, ya que la comunidad es propietaria de las tierras como se muestra en los planos de la comunidad y lo seguirá siendo.
Asimismo, se busca llegar a un acuerdo con el INAH- Yucatán para el pago correspondiente a 40 años de ocupación del territorio, para lo cual se deberá realizar un acuerdo por escrito que describa el monto y la información detallada de cómo se calculó dicha cantidad.
La comunidad en asamblea general decidirá el destino de los recursos recibidos por el uso por parte del INAH de la zona arqueológica, y la entrega de fondos no estará condicionada a la negociación de la propiedad de la tierra.
De igual forma, la Comunidad está de acuerdo en la reapertura del sitio, bajo un acuerdo, que describa que tanto la zona de estacionamiento, el cobro de entradas, la vigilancia, los guías y la co-administración del sitio será parte de un nuevo acuerdo con el INAH y será a través de los comités que la comunidad cree para este fin.
Como quinto punto se estableció que en el mismo acuerdo quedará asentado que todo lo relacionado con excavación, restauración, medidas de protección, cuidado, mantenimiento de las estructuras, de los monumentos históricos, etcétera, estarán a cargo del INAH.
Del mismo modo se condiciona que en las contrataciones de personal de apoyo para las excavaciones, restauración, mantenimiento de las estructuras y monumentos históricos, los habitantes de Telchaquillo tendrán derecho de preferencia.
También se exige un informe detallado de las excavaciones realizadas en Mayapán que incluya la lista de piezas descubiertas, el destino de cada pieza extraída de la zona y si existen las condiciones adecuadas, el retorno de cada una de las piezas que fueron extraídas para la creación de un museo comunitario.