Doble celebración tuvieron los pobladores de Homún, con la emisión de la sentencia en contra del permiso ambiental otorgado a una megagranja porcícola, por parte del Juzgado Segundo Distrito y la postura de la Secretaría de Desarrollo Sustentable para acatar la disposición jurídica.
Acompañados de representantes de diversas asociaciones civiles entregaron la sentencia establecida luego de evaluar los dictámenes periciales efectuados por especialistas y científicos.
En la sala de juntas de la dependencia estatal, la directora general jurídica de la SDS, Ana Paola Galue Ruz, garantizó que no impugnarán respectivo dictamen, postura que sorprendió a los presentes.
Lo que en un principio se convirtió en una protesta y clausura simbólica de las instalaciones de la SDS, al final se volvió en una fiesta para celebrar la postura de la dependencia, a favor de las familias de Homún.
El Juzgado Segundo de Distrito dejó sin efecto la autorización de Impacto Ambiental otorgado al proyecto de megagranja porcícola de la Producción Alimentaria Porcícola (PAPO), la cual es operada por Keken.
Por la asociación Indignación, Martha Capetillo, afirmó que luego de una espera siete años, un juez federal determinó que autoridades de Yucatán incurrieron en omisiones y violaron derechos al autorizar la Manifestación de Impacto Ambiental de la respectiva megagranja porcícola.