En la antesala del inicio de operaciones del Tren Maya, programado para el próximo viernes 15, las actividades del Programa de Mejoramiento de Zonas Arqueológicas (Promeza), impulsado por la Secretaría de Cultura federal, a través del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), también llegan paulatinamente a sus fases conclusivas.
Un ejemplo de ello son los trabajos en la construcción del Gran Museo de Chichén Itzá, los cuales alcanzan el 80 por ciento de avance en la parte arquitectónica, de allí que en los próximos días se dará paso a la instalación museográfica, misma que reunirá colecciones de arte maya nunca vistas en un mismo espacio.
El director general del INAH, Diego Prieto Hernández, refirió que con este nuevo museo, sumado a la reciente apertura del grupo conocido como Chichén Viejo o Serie Inicial y la renovación de los cedularios y la señalética en ocho mil 865 metros de senderos interpretativos.
Al participar en la conferencia de prensa matutina del presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, remarcó que “los trabajos del Promeza incentivarán a las y los turistas a dedicar, al menos, dos días para recorrer a fondo Chichén Itzá”.
El titular del INAH distinguió al Tren Maya como un proyecto integral de desarrollo sustentable y con justicia social, toda vez que mediante los Centros de Atención a Visitantes (Catvi) brindará opciones de desarrollo para los comerciantes y artesanos que habitan en las comunidades aledañas a las zonas arqueológicas de Chiapas, Tabasco y la Península de Yucatán.
En este sentido, enfatizó que el Catvi de Chichén Itzá tiene 57 por ciento de avance en su edificación, gracias a la labor realizada por el Consorcio ICA, el cual se encarga del componente constructivo del Promeza en el Tramo 4 del Tren Maya, que une a la ciudad de Izamal, en Yucatán, con Cancún, en Quintana Roo.
Al exponer sobre Ek’Balam, el otro sitio arqueológico atendido por el Promeza en ese mismo tramo, el antropólogo destacó que los trabajos de investigación, centrados en estructuras como la Acrópolis, han alcanzado 92 por ciento de avance.
En tanto que el Catvi, desarrollado también en diálogo con el Consorcio ICA, tiene 16 por ciento de avance en sus obras, y la renovación de los mil 598 metros de senderos interpretativos ha llegado al 50 por ciento.
En la conferencia matutina, el director general del INAH anunció que el próximo jueves 7 se reabrirán al público los dos espacios visitables de la Zona Arqueológica de Izamal: por un lado, sus estructuras prehispánicas; y por otro, su componente virreinal, representado por el exconvento franciscano de San Antonio de Padua.
Finalmente, al informar sobre los detalles generales del salvamento arqueológico en el Tramo 4 de la obra ferroviaria, explicó que, al corte del pasado lunes 4, el equipo de arqueólogos, restauradores y trabajadores que el INAH ha desplegado en este segmento ha logrado identificar y preservar cuatro mil 228 elementos inmuebles; 570 bienes de tipo mueble; 42 mil 617 fragmentos cerámicos; 16 entierros humanos y 145 rasgos naturales asociados a la presencia de grupos humanos pretéritos.