A cinco años del decreto de la veda permanente de pepino de mar para Yucatán, es urgente la realización de estudio para conocer la biomasa de esta especie, afirmó el responsable de la oficina de la Comisión Nacional de Acuacultura y Pesca (Conapesca), Pastor Contreras Avilés.
“Desde la veda, no hay un estudio exacto de la biomasa de pepino de mar”, por lo que hasta el momento se desconoce el grado de depredación y si hay el suficiente como para autorizar la captura.
Recordó que a partir de 2019 se decretó la veda permanente para Yucatán, según los estudios del Instituto Nacional de Pesca (Inapesca), los cuales determinaron que no hay el recurso suficiente de pepino de mar café (Isostichopus badionotus).
“Inapesca debe realizar los estudios y si hay la biomasa suficiente pues se evalúa para determinar si se autoriza la captura”, informó el entrevistado.
Contreras Avilés lamentó la depredación de esta especie, y con los operativos de inspección, afortunadamente se detuvo a las personas implicadas.
Sin embargo, aún hay zona de depredación, con sancochaderos, lo que afecta, notablemente, a la actividad pesquera de la entidad.
En Yucatán, la captura de pepino de mar, se convirtió entre 2010 a 2018 en la actividad pesquera más redituable, al grado que el valor de la captura fuera de cerca de 334 millones de pesos, de acuerdo con la Conapesca.