Estelas, columnas y observatorios de diversas ciudades precolombinas de Yucatán marcarán el fenómeno arqueoastronómico del Sol en el Cenit, del 22 al 24 de éste mes, anunciando el inicio del período de mayor insolación en la Península, reveló el astrónomo yucateco Eddie Ariel Salazar Gamboa.
En las zonas arqueológicas de la entidad, desaparecerán las sombras en vestigios verticales y la luz entrará a plomo en observatorios o sitios especialmente construidos para medir el tránsito del Sol por la bóveda celeste.
Ejemplificó el caso de estelas, las cuales fueron colocadas de manera vertical por los mayas precolombinos, como sucede en Dzibilchaltún y Uxmal, así como las columnas que no soportan techo alguno, como Chichén Itzá y Aké, entre otras urbes prehispánicas.
Aclaró que este suceso se registrará del 22 al 24 de este mes, cuando la deidad solar de los mayas, Kin, esté justamente sobre nuestra cabeza, el cual marca inicio de la temporada de cultivo con base a la posición del Sol, a las 12:37 horas.
El académico emérito del Instituto Tecnológico de Mérida (ITM) destacó que éste suceso determina el inicio de la siembra de la milpa, conocimiento fundamental para los mayas precolombinos, el cual, aún se aplica en el Estado, principalmente, por los antiguos agricultores.
Hoy en día, en el Estado predomina el preámbulo del suceso cenital, ya que prevalece el impacto de vientos secos, la preparación de las milpas, e incluso, anticipó que en los próximos días aparecería un halo solar, los cuales son algo difícil de observar, debido a la intensidad lumínica del astro.
“Los mayas saben que cuando predomina el viento con ausencia de lluvias es consecuencia de que en los próximos días el Sol estará justo en medio de la bóveda celeste”, acotó el profesor emérito de la Universidad Autónoma de Yucatán (UADY).
Consideró de notable la relación natural del movimiento del Sol con el medio ambiente, y en este año, para el mejor aprovechamiento agrícola de la región.
Mencionó que con el Sol en el cenit, los rayos son perpendiculares e impiden la formación de sombras en objetos verticales, tal el caso de columnas, lámparas, así como en personas que caminan.
Aclaró que este fenómeno cenital ocurre dos veces al año, del 22 al 24 de mayo así como del 18 al 20 de julio, es decir, una lunación antes y una después del solsticio de verano, respectivamente.
Señaló que tan sólo el viernes 24, el Sol saldrá a las 5:51 horas y se ocultará a las 19:24 horas, por lo que estará en el cenit a las 12:37 horas, y el día tendrá una duración de 13 horas con 33 minutos.
“Justamente en esos días, el Sol pasa justo sobre nuestras cabezas, por lo que los cuerpos verticales no generan sombras”, que en el caso de las zonas arqueológicas, destacan en las columnas, estelas y arcos falsos, entre otras edificaciones, acotó el ex coordinador del Grupo de Astronomía “Hipatia de Alejandría” del ITM.
Detalló que el próximo miércoles 22 se registrará Uxmal y Oxkintok, mientras que el jueves 23 sucederá en Chichén Itzá, y el viernes 24 acontecerá en Dzibilchaltún, Acanceh, Aké, y Mayapán, principalmente.
Salazar Gamboa explicó que recientemente, en Acanceh se descubrió un observatorio – pozo construido intencionalmente para registrar el paso del Sol en el cenit, el cual data del período Clásico.
Cuando el Sol está en el cenit, los edificios verticales no proyectan sombra, el cual se puede observar en el Templo de las Columnas de Aké y en el Templo de las Mil Columnas de Chichén Itzá.
Mientras que en El Observatorio o Caracol de Mayapán y de Chichén, el Sol se filtrará y dejará caer un halo de luz, abundó el premio “Jaguar del Turismo 2020” de la Asociación Mexicana de la Industria Turística (AMIT) Yucatán.
En el caso del Templo de las Siete Muñecas de Dzibilchaltún, la estela erigida en el sacbé o “camino sagrado” carecerá de sombra mientras que en el Templo, el Sol debió de pasar por el peculiar techo en forma de cono, estilo maya del Petén centroamericano.
Asimismo, se observa en El Osario, en Chichén Itzá, fenómeno arqueoastronómico que permite la consolidación de la religión, ya que el dios supremo de los mayas desciende al mundo de Xilbabá, la región de las tinieblas, agregó el premio al Maestro Distinguido del Estado de Yucatán 2021.
Explicó que Uxmal tiene una latitud de 20 grados y 36 minutos, y el miércoles 22, Sol tendrá una declinación de 20º34’, mientras que Chichén Itzá, el jueves 23 tiene una latitud de 20º44’ y la estrella tendrá una declinación de 20º46’.
Incluso, Dzibilchaltún tiene una latitud de 20º59’ y el astro tendrá una declinación de 20º46’, para el próximo viernes 24.