Por ende, agentes de la Policía Estatal de Investigación (PEI) de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) en coordinación con la Fiscalía General del Estado (FGE), lo detuvieron hoy, en Tizimín.
Un juez lo halló penalmente responsable del delito de abuso sexual contra una menor de edad, por lo que le dictó sentencia condenatoria en diciembre de 2017, misma que quedó firme en abril de 2018.
De tal manera, se le impusieron cuatro años de cárcel, pero en enero de 2019 hizo uso del beneficio sustitutivo de prisión preventiva por jornadas de trabajo a favor de la comunidad y el pago de una sanción pecuniaria.
Sin embargo, al incumplir el sujeto en los términos establecidos, en abril de 2023 se revocó el beneficio y se ordenó su reaprehensión.
Tras localizarlo en la colonia San José Nabalam, de Tizimín, los agentes y fiscales investigadores lo trasladaron al Centro de Reinserción Social (Cereso) de Ebtún, Valladolid, para entregarlo al juez que ordenó su reaprehensión.