En el Instituto Nacional de Antropología e Historia continúa la polémica con denuncias de doble moral, ataques al personal, proyectos de salvamento de lujo, corrupción, tráfico de influencias y nepotismo, protagonizadas por el propio titular, Diego Prieto Hernández, la coordinadora Nacional de Arqueología, Martha Lorenza López Mestas Camberos, y la titular del Centro INAH-Yucatán, la arqueóloga Anna Goycoolea Artís.
De acuerdo con los documentos proporcionados y la investigación efectuada, la problemática tiende a crecer, por lo que son cada vez más los trabajadores de la Península de Yucatán que denuncian las diversas irregularidades.
En el caso de López Mestas Camberos, su gestión se distingue por el desconocimiento de la situación arqueológica del país, lo que provoca que proyectos como el Salvamento Arqueológico del Tren Maya, junto con sus allegados se despachan con la cuchara grande.
Tan sólo con el Programa de Mejoramiento de Zonas Arqueológicas (Promeza) destaca el favoritismo a la empresa Triopesa, SA de CV, a la cual se le entregó diversas adjudicaciones directas, por cerca de tres mil 600 millones pesos, para trabajar en todos los tramos del Tren Maya, principalmente.
El millonario presupuesto de señalética y equipamiento es manejado y controlado desde la Coordinación Nacional de Arqueología del INAH a través de la Dirección de operación de Sitios, cuya titular, María Guadalupe Espinosa Rodríguez, presiona a directores de los centros INAH de campeche, Tabasco, Quintana Roo y Yucatán para que entreguen los contenidos y apresurar el proceso de contratación de la empresa Triopesa. con dirección en la ciudad de Puebla.
Tal el caso del oficio número 401.11C.8-2023/1123 de fecha 28 de junio de 2023 dirigido al Fernando Esparza Posada, gerente de la empresa ICA (responsable de la construcción del tramo 4 del Tren Maya), en donde solicita que se contrate a Triopesa.
En el oficio, la coordinadora nacional de arqueología señala que Triopesa cumple con la experiencia, calidad y normatividad requerida, empresa en la cual Martha Lorenza López Mestas Camberos y María Guadalupe Espinosa Rodríguez son accionistas o copropietarias.
El Consejo de Arqueología del INAH que preside Laura Ledesma Gallegos, aprueba proyectos a modo a su núcleo de amigos, así como a su compañero sentimental (Mario Cordova Tello), además de compadres.
De igual forma, es notable el trafico de influencias y nepotismo, pues a cargo del presupuesto del Promeza, con viáticos, hospedaje, salarios altísimos y demás cosas prohibidas en la 4T, el titular del INAH tiene inscrito a su hijo y a la compañera sentimental del director del Museo Regional de Antropología Palacio Cantón, Carla Martínez.
Desde hace algunos meses, la nueva titular del INAH-Yucatán, Anna Goycoolea Artis, reside en un conocido hotel de la avenida Paseo Montejo.
La funcionaria trabajó en una ONG que colaboraba con el Consulado de México en Barcelona, de donde después de sembrar discordia, intrigas y calumnias salió huyendo.
Al llegar a México pidió apoyo a su padrino, Prieto Hernández, quien la colocó en el Promeza. a cargo de la planeación de los Centros de Atención a Visitantes (Catvis), con salario de más de 60 mil pesos mensuales, muy superior a cualquier investigador emérito del INAH.
Goycoolea Artis destaca por su desconocimiento de la problemática local, en cuestiones de monumentos históricos, pero sobre todo la falta de atención a los múltiples sectores empresariales del Estado.
Asimismo, ha cancelado numerosas actividades, tal el caso de conmemoración del bicentenario de la instalación del Congreso Constituyente, prevista en el histórico inmueble aledaño a la Iglesia de Tercera Orden.
Tomó posesión de la dependencia el pasado 9 de junio, y en todo momento ha negado entrevistas a los comunicadores.