La incursión de la nube de polvo del Sahara pasó anoche por desapercibida en la Península de Yucatán, la cual, mañana se disiparía, de acuerdo con el pronóstico del laboratorio de Química y Dinámica de la Atmósfera de la NASA.
La respectiva concentración de partículas disminuiría el potencial de lluvias al mismo tiempo que provocarían un aumento en el número de personas con alergias y con problemas respiratorios crónicos, en especial, los que se están recuperando de las secuelas de Covid-19.
De acuerdo con la información proporcionada, la nubosidad ingresó a México, primeramente por la Península de Yucatán, en la noche pasado lunes 24, por lo que pasó inadvertida.
A consecuencia de su amplitud, permanecerá en la región aunque se dirige al Norte y hoy afectaría a Veracruz, para continuar hacia Estados Unidos.
Asimismo, mañana se disipará el respectivo fenómeno natural, por lo que a partir de hoy se notará un tono más amarillamiento en el cielo durante el día el atardecer será más intenso, y el deterioro de la calidad del aire.