Durante 2022, en Yucatán, se duplicó el número de personas ingresadas a una clínica u hospital para la atención de la lesión que sufrieron con armas punzocortantes y/o de fuego, al grado que se reportó es la cifra más alta en ocho años, estableció la Secretaría de Salud federal.
Sin embargo, en el Estado es considerablemente el descenso de las denuncias por lesiones dolosas cometidas en los últimos ocho años, e incluso, la incidencia de 2022 fue la más baja de 2014 a la fecha, reveló el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (Sesnsp) de la Secretaría de Gobernación (Segob).
Incluso, mientras que en cuanto al número de personas ingresadas a nosocomios se ocupó el noveno lugar nacional, fue la segunda entidad federativas con el menor número de querellas.
Es decir, cada 12 horas, una persona era atendida por personal médico, debido a la herida que tenía, mientras que cada 32 horas, una acudía a interponer una denuncia penal ante el Ministerio Público.
El Sistema Nacional de Vigilancia Epidemiológica (Sinave) de la Secretaría de Salud federal reveló que Yucatán está entre las ocho entidades federativas de menor incidencia de personas con “Heridas por armas de fuego y punzocortantes”.
Curiosamente, a nivel estatal la problemática aumentó mientras que en el país, así como en Campeche y Quintana Roo, hubo un decremento.
Durante 2022, en el país se registraron 57 mil 737 personas ingresadas a clínicas u hospitales del país, tanto públicos como privados, cuya incidencia subió en 6.88 por ciento, ya que en 2021 fueron 54 mil 21.
La mayor problemática ocurrió en Chiapas, con cinco mil 681 lesionados, el 9.84 por ciento, seguido de Oaxaca, con cuatro mil 623 casos, el 8.01 por ciento, y la Ciudad de México, con cuatro mil 573, el 7.92 porcentual.
Del otro extremo de la tabla nacional está Durango, con 179 casos, el 0.31 por ciento, seguido de Baja California, con 213 lesionados, el 0.37 por ciento, y Tlaxcala, con 263 heridos, el 0.46 porcentual.
En el caso de Yucatán, quedó en el octavo lugar de la tabla nacional, con 734 casos de personas que ingresaron a un nosocomio a consecuencias de las lesiones sufridas, con un incremento del 111.53 por ciento, ya que en 2021 fueron 347 lesionados.
De 2014 a la fecha, es la segunda más alta en nueve años, pues en ese primera fueron 849 lesionados, y la mínima fue en 2018, con 178 casos.
A nivel regional, en Quintana Roo, la problemática decreció en 4.54 por ciento, al pasar de mil 894 a mil 808, mientras que en Campeche bajó en 0.8 por ciento, pues en 2021 fueron 628 casos y en 2022 fueron 623.
Las mujeres son las menos afectadas, pues del total nacional, hay 15 mil 202 lesionadas, el 26.33 por ciento, y en Yucatán hay 243 féminas, el 33.11 porcentual.

Incidencia delictiva

El SNSP de la Segob reveló que durante 2022, en el país se abrieron 163 mil 986 carpetas de investigación por el delito de lesiones dolosas cometidas con armas de fuego y blancas, con un incremento del 5.46 por ciento respecto al año anterior, cuando el acumulado fue de 155 mil 490 querellas.
El delito de lesiones, como su nombre lo indica, es el que consiste en causar lesiones a una persona, entendiéndose por estas según el artículo 288 del Código Penal Federal, toda alteración en la salud o daño que deje huella material en el cuerpo.
Por ende, se trata de un delito del fuero común, por lo que se castiga conforme a las diferentes legislaciones de los Estados de la República Mexicana.
Mediante el delito de lesiones se perjudica la salud física o mental de una persona. El castigo por las diversas lesiones se basa en los siguientes aspectos: La severidad de las mismas, además de si estas se hicieron de forma dolosa (con intención) o culposa (por accidente).
El dolo consiste en la comisión de un delito, con el deseo y la voluntad de causar un daño, por lo tanto cuando se habla de lesiones personales dolosas se puede argumentar que son causadas de mala fe, y por lo tanto debe existir una sanción sobre el individuo que tome la decisión de incurrir en ellas.
La Segob estableció que la mayor incidencia se registró en el Estado de México, con 49 mil 993 denuncias, el 30.49 por ciento, seguido de Guanajuato, con 13 mil 604 querellas, el 8.3 por ciento, y Jalisco, con 11 mil 198 casos, el 6.83 porcentual.
En contraste, a lo largo del año, en las agencias del Ministerio Público de Tlaxcala se interpusieron 146 denuncias, el 0.09 por ciento, en Yucatán fueron 196 querellas, el 0.12 por ciento, y Nayarit, con 443 casos, el 0.27 porcentual.
De acuerdo con la “Incidencia Delictiva del Fuero Común”, en Yucatán, la problemática aminoró en 25.47 por ciento, con respecto a 2021, cuando la cifra fue de 263.
Incluso, en 2022 fue la cifra más baja en ocho años, pues la cifra más alta fue en 2014, con tres mil 431 denuncias.
Del total de lesionados registrados durante el año pasado, 55 presentaron heridas provocadas por armas blancas, el 28.06 por ciento del total, ya sea navajas, cuchillos, machetes, punzones, etc, cifra que disminuyó en 27.63 por ciento en comparación con 2021.
Asimismo, siete querellas fueron por el empleo de armas de fuego, dos casos se registraron en mayo, mientras que el resto, en marzo, abril, julio, octubre y noviembre, respectivamente.
El empleo de dichas armas representó el 2.3 por ciento del total, y la cifra es 16.67 por ciento superior con respecto al año anterior, cuando el acumulado fue de seis.

Deja un comentario