Durante la segunda quincena de septiembre, en la Península de Yucatán se registraron regiones anormalmente secas, debido al déficit de lluvia que prevaleció, reveló la Comisión Nacional del Agua (Conagua).
Las regiones que recibieron menor lluvia que el promedio fueron la Península de Baja California, el noreste, las costas del Pacífico Sur, la vertiente del Golfo de México, el sureste y la mayor parte de la Península de Yucatán, así como Durango.
Esta disminución o inhibición de las lluvias se asoció con el dominio de un sistema de alta presión en los niveles medios de la atmósfera que afectó varias regiones de la República Mexicana, como la Península de Yucatán, el occidente y el Golfo de México.
Los déficits en las lluvias favorecieron el incremento de las condiciones anormalmente secas (D0) en el norte, noreste, Pacífico Sur, la vertiente del Golfo de México, el sureste y la Península de Yucatán.
Mientras que la sequía de moderada a severa (D1 a D2) se extendió en la Península de Baja California.
Al cierre del mes de septiembre de 2021 el área con sequía de moderada a extrema (D1 a D3) fue de 8.02 por ciento a nivel nacional, ligeramente mayor, en 0.09 por ciento, que lo cuantificado al 15 de septiembre del mismo año.
Actualmente, la sequía está ausente en 24 estados del país, por lo que la problemática afecta a 68 municipios de ocho entidades federativas, principalmente, los del Norte del país.
Las regiones Frontera Sur, Pacífico Sur, Golfo Centro y Península de Yucatán, principalmente, se mantienen libres de sequía hasta mediados del noveno mes de 2021, pero el riesgo prevalece, y más ahora que aparecieron regiones anormalmente secas.
Actualmente, la Península de Yucatán lleva más de un año libre de sequía, sin embargo, y a pesar que volvió a surgir el riesgo de aparición, con la condición de anormalmente seco, nuevamente se desvaneció dicho fenómeno natural, pero reapareció el riesgo.
El Servicio Meteorológico Nacional (SMN) explicó que en toda la Península de Yucatán, la sequía está ausente desde la segunda quincena de mayo de 2020, y Celestún fue el único municipio que se mantuvo sin secuelas a lo largo de ese año.
Sin embargo, en la segunda mitad de julio de 2020, inició la condición de anormalmente seco, que es el proceso previo al establecimiento de la sequía, la cual duró hasta finales de septiembre, al grado que abarcó cerca del 40 por ciento de la superficie.
La interfase entre la normalidad y la sequía, denominada como D0, es una condición de sequedad y no de una categoría de sequía cuya duración es suficientemente prolongada como para causar desequilibrios hidrológicos significativos.
Por ende, la Península de Yucatán tiene 14 meses de permanecer libre de alguna condición de sequía, de la moderada a la excepcional (D1-D4), sólo que ahora reapareció la condición de anormalmente seco (D0), pero esta situación se desvaneció.
De acuerdo con el Monitor de Sequía en México (MSM), la condición anormalmente seco (D0) prevaleció en la Península hasta finales de agosto, y reapareció en la segunda quincena de septiembre.
