A 24 horas del inicio de la descarga del balasto en el Puerto de Altura de Progreso, en Yucatán, el Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur) informó que se cuenta con un avance del desembarque del 50 por ciento, de las siete mil 302 toneladas con la que arribó el barco en el primer viaje procedente del puerto de Veracruz.
El gerente de vía del tramo 3 del Tren Maya, Aitor Gálvez Macías, señaló que durante los próximos 12 meses se estima que los 583 mil metros cúbicos de balasto que representarían un millón de toneladas requerido para la obra, puedan estar ya acopiados para proceder al tendido.
De acuerdo a la operatividad y logística del consorcio Azvindi, quién es el encargado de la logística, se espera incrementar el traslado de balasto a dos barcazas, así como las góndolas para el transporte terrestre.
Indicó que la eficiencia en tiempos de descarga, traslado y seguridad del balasto se basa en la coordinación de todas las autoridades federales, estatales y municipales que están involucradas en el proceso.
Durante el recorrido de supervisión que se realizó en el muelle 4 del puerto de progreso, con autoridades del Tren Maya, Secretaría de Comunicaciones y Transportes y la Administración Portuaria Integral de Progreso, el especialista explicó que después de colocar en las góndolas el balasto, se procede al traslado del material en el centro de acopio, el cual está ubicado en Tixpehual, por lo que se espera que sea a mediados del próximo año cuando se pueda ver parte del material montado en la vía del tren en tramo 3.
Cabe destacar que el balasto es una piedra basáltica volcánica que es muy dura. Su forma es de 30 a 60 centímetros de dimensión cúbica y servirá a modo de colchón para amortiguar el paso del tren. Por las características específicas ésta se produce en Actopan, municipio de Veracruz, bajo los estándares de calidad requeridos.
En el sitio estuvieron presentes el delegado de la SCT en Yucatán, Luis Pimentel, la directora jurídica de la empresa consignataria Oso Alfa, Silvia Osorio Alfaro y los gerentes comerciales y de operación e ingeniería de Api, Alicia Lara y Ernesto Navarro del Toro, respectivamente.
