- De los sectores económicos más golpeados por la pandemia
MÉRIDA, Yucatán.- Hoy se celebra el Día del Artesano, uno de los sectores de la población más golpeado económicamente por la crisis de salud debida a la enfermedad Covid-19 y que ha generado el cierre de gran cantidad de talleres, situación que afecta de manera directa a miles de yucatecos, la mayoría viviendo en niveles de marginación de media a muy alta.
En Yucatán, cálculos indirectos realizados por la Casa de las Artesanías, definen alrededor de 20,000 artesanos distribuidos en 15 ramas. El bordado constituye el 40 por ciento, siendo por lo general mujeres las que se dedican a esta actividad. Le sigue el urdido de hamacas con el 30 por ciento. Las tejedoras de henequén son el 15 por ciento. Cerca del 7 por ciento, lo conforman los talladores de madera, y el 8 por ciento restante se dedica a las otras diez ramas.
Sin embargo, es muy difícil precisar una cifra de artesanos, ya que su actividad no está contemplada en el censo económico, debido a que los negocios generalmente son pequeñas unidades de producción, carentes de una estructura organizacional formal, en donde todos los miembros de la familia participan en las actividades del micronegocio, por lo que la mayoría no contrata personal para llevar a cabo las diferentes etapas del proceso de producción, señalan las investigadoras Marbella Guatzozón Maldonado, Ana María Canto Esquivel y Hermila Andrea Ulibarri Benítez.
En su artículo: “Contexto actual de los micronegocios de artesanías de madera en la comisaría de Dzityá, Yucatán”, destacan que la mayoría de estos negocios opera en un mercado local y para aumentar las ventas y mantener o aumentar la porción de mercado, los dueños del negocio generalmente recurren a prácticas tales como la venta de los productos a precios más bajos que los competidores, o el pago a guías de turistas para que les lleven clientes; aunque esto signifique el sacrificio de una parte de sus ganancias.
El Fonart reconoce esta grave situación económica que enfrentan, por ello apunta que los artesanos se han visto severamente afectados durante la pandemia, al ser un sector que vive al día de la venta directa de sus productos y del flujo del sector turismo, lo que ha mermado ante el confinamiento por el Covid-19; además cuenta con los apoyos que pueda obtener del propio fondo y las casas de las artesanías de los estados.
La artesanía yucateca es valorada no solo a nivel nacional, sino también internacional, y los artesanos son reconocidos por su creatividad. Entre las más notables se encuentran los textiles, donde Yucatán es el primer exportador a nivel nacional de hipiles, guayaberas y bordados, siendo Kimbilá, Tekit y Ticul de sus grandes exponentes.
Así como las hamacas, un producto típico de la región, que se fabrica en diversos municipios; sin embargo, la materia prima principal, los hilos, se elaboran en el municipio de Tixcocob, en una fábrica.
Otras artesanías características de la región son la joyería, elaborada con oro y plata, así como con coral, cocoyol y espino de henequén, el tallado en madera y piedra de Dzityá y la cerámica, esta última elaborada en poblaciones como Ticul.
Las investigadoras, en su artículo publicado en la revista de divulgación científica de la Universidad Tecnológica de León, resaltan la creatividad de los artesanos yucatecos como los de Dzityá, quienes realizan innovación mediante la adopción de nuevos materiales y equipo utilizados en el proceso de elaboración, así como la implementación de nuevos diseños, tamaños y formas en el producto.
La artesanía es una de las manifestaciones más visibles de la diversidad cultural de una sociedad, ya que refleja creatividad, identidad y patrimonio cultural. Esta actividad posee un valor patrimonial cultural tangible e intangible que debe ser reconocido, protegido, enriquecido, proyectado y asegurado para el futuro, ya que dentro del 20.3 % del PIB que representa solo el sector de la cultura, se encuentra las artesanías ya que forma parte del porcentaje del sector.
De acuerdo al Instituto Nacional de Estadísticas y Geografía (Inegi), en el marco de la celebración del Día del Artesano, a nivel nacional, en 2019 las artesanías emplearon 489 890 puestos de trabajo ocupados remunerados; esto representó 35.1% de los puestos que empleó el sector de la cultura en su conjunto.
Sin embargo su participación en el PIB es baja, ya que el sector de la cultura generó 724 453 millones de pesos corrientes en 2019, de los cuales, las artesanías aportaron 138 291 millones de pesos que representan solo el 19.1% del sector cultural.
Asimismo, su presencia en los hogares mexicanos aún es mínima, ya que en 2019 el gasto en artesanías realizado por los hogares ascendió a 135 453 millones de pesos corrientes, lo que equivales a 18.7% del total de gasto realizado por los hogares en bienes y servicios culturales.