- Ambas perdieron la vida mientras realizaban su servicio social
MÉRIDA, Yucatán.- La muerte de las jóvenes médicas Mariana, en una comunidad chiapaneca, y Karla en una yucateca, caló hondo en Mérida, donde estudiantes de la carrera de medicina de las universidades más prestigiosas de la ciudad realizaron un mitin pacífico y una marcha para exigir el esclarecimiento del asesinato, pero sobre todo mejores condiciones en la práctica de su servicio social.
“¿Cuántos pasantes más? ¿Cuántas mujeres más?”, “Exigimos Servicio Social Seguro”, “Justicia para Mariana/Karla”, “Todos somos Mariana”, “No estamos todas nos falta Karla y Mariana”, rezaban las pancartas de decenas de estudiantes de las universidades Autónoma de Yucatán Marista y Anáhuac Mayab.
Una de las representantes, quien omitió su nombre, explicó que la marcha surgió por la indignación de los estudiantes sobre lo sucedido a Mariana en Ocosingo, Chiapas, mientras realizaba su servicio social; y a Karla en el municipio yucateco de Tahdziú, al realizar su pasantía.
“La pasantía y el servicio social se han convertido en una actividad de riesgo, y más si es en una zona rural totalmente alejados de su familia, de sus padres. Muchas veces no cuentan con el sustento económico y arriesgan no sola su integridad psicológica sino que también física, y cómo podemos darnos cuenta ahora también con la vida de estas pasantes”
Pero ya no tenemos miedo, apuntó, ni pensamos quedarnos callados, queremos luchar y manifestarnos para ser escuchados y entablar conversación con las autoridades, llegar a acuerdos y reformas que garanticen nuestros derechos.
Como informamos, Mariana fue encontrada sin vida la semana pasada en la comunidad Nueva Palestina de Ocosingo. La necropsia legal determinó que la causa de su deceso fue por “asfixia mecánica secundaria por ahorcamiento”. El médico legista informó que el cuerpo no presentaba huellas de violencia ni de agresión sexual. Las autoridades no descartan que pueda tratarse de un ajuste de cuentas, ya que hace un par de meses la joven presentó una denuncia en el Ministerio Público por violación.
Mientras que Karla, originaria de Mérida, en septiembre pasado se suicidó en el Centro de Salud de Tahdziú, donde se quedaba a dormir en virtud que no tenía rentada alguna vivienda.
Después de un mitin en el Monumento a la Patria, cerca del mediodía los participantes se encaminaron al parque de Santa Ana, donde varios jóvenes exigieron cambios en el servicio social y pasantía del área de medicina, para garantizar el bienestar e integridad de los estudiantes. Propusieron que se cancelen las zonas donde el gobierno y las autoridades universitarias no puedan respaldar la protección de los estudiantes, entre otras demandas.
En el lugar hizo acto de presencia la profesora María Guadalupe Ku Cobá, madre de Karla Gutiérrez, quien con voz entrecortada y manos temblorosas pidió a las autoridades justicia para su hija, quien después de cuatro meses aún no tiene respuesta.
“Me tiemblan los pies, sangra mi corazón, cuatro meses que he estado encerrada en mi casa pidiéndole a Dios que me dé luz y guía para llegar a los culpables, después de fallecida mi hija me entero que tuvo severas crisis de ansiedad que no me fueron notificada, a mi hija la obligaron a estar en un cuartucho de Tahdziú, la obligaron a estar en ese hospital sin seguro; hasta el día de hoy no he recibido respuesta alguna más que luego le llamamos”
MARÍA GUADALUPE KU COBÁ, MAMÁ DE KARLA
Al igual que Karla, Mariana había solicitado a las autoridades de su escuela que le cambiaran el lugar de su servicio social, mostrando una denuncia que presentó en el Ministerio Público de esa entidad denunciando violación, al parecer de sus propios compañeros médicos.
Finalmente, los estudiantes de medicina guardaron un minuto de silencio por Mariana y Karla.